Por él Gabriela Spanic lo perdió todo, y él pasó de ser actor a ser pastor

Para nadie es un secreto que Gabriela Spanic es una de las actrices más bellas de la televisión, durante los años 90s ella se convirtió en una de las más cotizadas de los medios, novelas como La usurpadora y La infiltrada fueron grandes éxitos en su carrera.

Ella estaba casada con el actor Miguel de León cuando en el 2002 inició una relación con su compañero de la telenovela La Venganza, José Ángel Llamas, quien también estaba casado, por lo que su relación estuvo siempre bajo la lupa de la infidelidad y el engaño. Ellos terminaron y Gabriela aseguró que él la había decepcionado como “hombre y como amante” por lo que nunca más volvieron a hablar.

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Ahora José Ángel Llamas dejó la actuación hace más de una década y ahora se dedica al 100% a ser pastor de una iglesia al sur de la Florida. En la página web de dicha iglesia se puede leer: “Dios llamó a José y Mara del medio del entretenimiento en la televisión y desde que conocieron del Señor su vida cambió radicalmente, comenzaron su caminar en la fe y eventualmente se dedicaron al ministerio a tiempo completo”.

José Ángel Llamas está casado con la exactriz Mara Croatto

Ellos han formado una familia con tres hijos: Juan, Rafael y Michael. Juntos atienden el templo y hacen los servicios religiosos. José Ángel Llamas es el pastor principal de Calvary Chapel Fort Lauderdale. Y no piensa volver a la actuación pues descubrió en la fe su mejor empleo.